FLAMENCA, NEGRO Y BLANCO, POR TAMARAL

¡Hola a tod@s! Un año más llega la feria de mi ciudad, una cita que para mí es imprescindible. Durante 9 días me mudo al recinto ferial ya que trabajo allí durante estos días, y también salgo allí con amigos y familiares. Me encanta la feria, desde pequeña la espero con ganas año tras año, y sin duda, para mí, vestirme de flamenca es un lujo del que disfruto cada año pudiendo lucir diferentes trajes y modelos repletos de volantes  y de aire flamenco.

Mirad el movimiento de estos volantes... es mágico. Un año más, es el diseñador cordobés Francisco Tamaral quien me viste cada día de feria. No tengo palabras de agradecimiento para él y para Carmen, por como me tratan, por su profesionalidad, por su cariño... llegar a su tienda y verme envuelta de volantes es increíble, y elegir los modelos cada año es más complicado porque cada temporada hay más entre los que elegir, y todos preciosos.

¡¡Gracias Carmen y Francisco por facilitarme tanto el ir a la feria tan flamenca como me vestís vosotros!! Ya sabéis que soy feliz luciendo los vestidos.

Este que hoy os muestro es el primero de esta feria. Ya comenté otro año que el negro no es un color que yo eligiría para flamenca, pero los trajes de Tamaral negros son tan elegantes, que me gustan todos. Lucí uno hace dos temporadas y este año he repetido con el color.

El negro es acompañado por el blanco en este traje maravilloso. Mirad la parte de la espalda adornada con flecos.

Los detalles del vestido marcan la diferencia.

Los flecos son de un mantón que el diseñador compró hace años en Madrid. 

Tanto la parte delantera como la trasera va adornada con flecos.

Los volantes como veis, son blancos por abajo. 

Para este look he elegido este bolso que mi tía le regaló hace un tiempo a mi madre. Tiene el tamaño perfecto para llevar todo lo que necesito.  ¡Gracias tita! porque como ves, este tipo de regalo también lo aprovecho yo. El bolso es de raso negro y va bordado con pedrería. Tiene cadena, pero yo se la he guardado.

El encaje es una auténtica obra de arte.

Los pendientes son un regalo de otra de mis tías. No pesan y eso se agradece cuando tienes que llevarlos durante horas.

Para romper el binomio blanco y negro, elegí el rosa fucsia de la flor que me ha regalado mi chico y de los labios. 

El encaje también lo encontramos en las mangas.

Y así quedan los volantes de las mangas.

Para el peinado he elegido una trenza y un moño bajo.

¿Os gusta el look?

Un beso enorme a tod@s y gracias por pasar por el blog

ARI