¡Hola a tod@s! Comienza la semana en el blog de nuevo entre volantes.
Hoy os muestro otro de los diseños de Francisco Tamaral que he lucido en esta feria. Si todos los trajes de este diseñador me gustan cuando los veo colgados en las perchas, al ponérmelos me gustan mucho más y es que la manera en la que realzan el cuerpo y cada uno de sus detalles, hacen que sean obras de arte.
El encaje me enamora. Desde que lo vi entre todos los modelos, este vestido llamó mi atención por su color y sobre todo por el precioso encaje del cuerpo. Es un rojo sangre que se acerca más al burdeos que al rojo, aunque en las fotos se vea más rojo de lo que es. Los tonos rojos son mis favoritos para flamenca, aunque es cierto que es un color que puede hacer que un traje sea precioso o roce lo vulgar. En el caso de los trajes de Tamaral, sin duda, todos van acompañados por un toque especial y elegante. Ya el año pasado llevé un traje rojo que hizo furor, y este también ha llamado mucho la atención este año.
Toda la feria he estado muy bien acompañada por amigos, por mi familia, por mi cuper compañera Ángela, y por mi chico.
Esta es la portada de la feria de Córdoba.
Mi inseparable Ángela también ha ido vestida por Tamaral toda la semana. Es un lujo que las dos compartimos, igual que el trabajar juntas en feria. Ella suele apostar por los trajes cortos, yo, siempre por trajes de flamenca largos. Y vamos con los detalles...
Las aplicaciones del vestido en tonos dorados son espectaculares.
Los volantes, completamente a juego con el cuerpo del traje tienen un vuelo precioso como podéis ver en las primeras fotos y además, son un poco más cortos por un lado que por el otro.
Este es el encaje. Las mangas no van forradas mientras que el cuerpo si va forrado en naranja,
La manga larga acaba en este volante.
La flor también está diseñada y confeccionada por Francisco Tamaral. Cuando elegí este vestido, Francisco me dijo que tenía una flor pensada para él, y además, la pude lucir con otro modelo que os mostraré en el siguiente post. Es una flor espectacular, en la foto no se aprecia bien, pero está teñida con brillo dorado y tiene un toque burdeos en las hojas.
Los pendientes son regalo de una de mis tías y el peinado, en este caso, es un moño bajo hecho con trenzas anchas mientras que la parte de arriba elegí llevarla más suelta y menos tirante que en ocasiones anteriores. La foto está hecha después de todo el día en la feria, aguantó sin caerse y eso que lo hice en 5 minutos y en casa.
Esta vez, los zapatos elegidos son unas cuñas altas. He roto tres pares de zapatos esta feria, unos con solución y dos que han ido directos a la basura... señal de que la he pateado bien.
Un beso enorme a tod@s y gracias por pasar por el blog.
ARI