FLAMENCA, ENCAJE DE FRANCISCO TAMARAL

Hola a tod@s!! Hoy os muestro el que para mí ha sido el traje de flamenca más original y espectacular que he lucido esta feria. El rojo me gustó muchísimo porque como expliqué en el post en el que os lo mostré, siempre había querido un traje rojo y por unas cosas y por otras, al final acababa eligiendo otro color, pero este traje... este es una joya, un tesoro... y para mí llevarlo ha sido un auténtico lujo y un placer.

Han sido muchas las personas que me han preguntado por él, y es que es diferente a lo que se suele ver por la feria de mi ciudad. Si tuviese que definirlo con una palabra, esa seria: elegante.

Si por delante es precioso, por detrás es espectacular. 

El cuerpo y las mangas son de encaje. Mientras que el cuerpo lleva forro blanco, las mangas son completamente transparentes, al igual que la parte superior de la espalda, dando ese juego de transparencias-encaje que tan elegante queda.

En la parte del pecho lleva un bordado de flores superpuestas en tono aguamarina.

Las mangas lo hacen especial. Personalmente prefiero los vestidos de flamenca con mangas, y estas al ser de encaje, no pegan nada de calor, por lo que se puede llevar sin asfixiarnos, ya que la feria de mi ciudad suele contar con temperaturas altas, aunque este año ha hecho un tiempo estupendo.

El corte de las mangas es tan original y le da un aire tan diferente al vestido, que es lo que yo más destacaría de este traje.

Al igual que los dos anteriores, este modelo es de Francisco Tamaral. Me encanta la medalla que lleva en la cremallera, un toque de personalidad que acompaña a casi todos los modelos de este gran diseñador cordobés.

El pelo lo llevo recogido en un moño porque la espalda debía quedar al descubierto. He optado por moños todos los días menos el que llevé el traje verde que preferí llevar coleta.

Confirmo que es posible enamorarse de un vestido... yo estoy enamorada de este :)

Los puños son así de bonitos, con el detalle de los botones.

Los complementos: una flor bien grande blanca y unos pendientes de filigrana.

Siempre me han gustado los volantes pomposos, por eso he evitado los trajes canasteros, y este, aunque tiene un corte muy canastero, ofrece un juego y un movimiento de volantes que llama la atención. No son caídos ni sin vuelo, como suelen ser los canasteros.

Los bajos de los volantes llevan tul azul marino, el mismo tono del encaje

Podría vivir vestida de flamenca toda la vida, especialmente con un traje como este...

Un beso enorme a tod@s y gracias de corazón por las visitas, comentarios y correos.

ARI